Consiguió el primer puesto del top 100 mundial de The Best Chef Awards. David Muñoz sigue al frente de DiverXo (tres estrellas Michelin) con creatividad, pasión y dedicación absoluta. Está, sin duda, en su mejor momento.

«Un sueño hecho realidad». Así lo expresó David (o Dabiz) Muñoz al ser distinguido como Mejor Chef del Mundo en la quinta edición de The Best Chef Awards, en septiembre de 2021. También añadió no sentirse «mejor cocinero que ayer, ni el mejor del mundo». En cualquier caso, el premio es el reconocimiento a años de esfuerzo y trabajo duro.

Fue el cocinero más joven de Europa en obtener en 2013 su tercera estrella Michelin. Unos años antes, había llegado a dormir en el suelo de su restaurante porque no podía permitirse pagar un alquiler: «Cuando empecé en la cocina con 17 años te decían que el oficio era trabajar 16 horas al día, que no ibas a tener una vida normal. Los tiempos han cambiado y la hostelería debe ser sostenible a nivel humano».

En 2021, la revista Forbes lo incluyó entre los españoles más creativos del mundo de los negocios. ¿Cuál es el ingrediente secreto de su éxito? La página web de DiverXo deja claro que el local ofrece «Un viaje por la cocina hedonista, golosa y creativa de Dabiz Muñoz, cocina vanguardista en la que todo es posible».

Es inútil definir el talento de David Muñoz como si se tratase de desgranar una de sus recetas, pero estas son algunas de las claves de su propuesta:

• Se basa en una cocina sin prejuicios, de actitud radical, inspiración multicultural y presentación dirigida a los cinco sentidos.

• David ha transformado sus sueños en recetas. Por eso su oferta sorprende y deja al comensal con ganas de repetir.

• No cocina para una minoría. Se ha convertido en un referente (con imitadores y detractores) y su público potencial es cada día más amplio.

• Sus platos son mucho más que una fusión de ingredientes, texturas, maridajes y energía creativa. ¿Un ejemplo? Su reciente colaboración con Rosalía para convertir un éxito de la cantante en una sabroso sándwich: Chicken Teriyaki.

En definitiva, quien descubre este mundo de sensaciones (dulces, picantes, ácidas, amargas, agrias, umami, ahumadas, especiadas...) puede convertirse en embajador de una experiencia inolvidable. A pesar de que sea casi imposible describir sabores con palabras.

Fuente imágenes: La Vanguardia (CLV)